El entrenamiento personal enfocado hacia la salud articular y metabólica

Hoy os vamos a hablar de diferentes aspectos que ayudan considerablemente a nuestro estado de salud articular  (sistema musculoesquelético) y aumento de gasto calórico y eficiencia de las diferentes vías metabólicas existentes en el organismo.

En primer lugar mencionar que la función principal del músculo es generar tensión (punto y aparte es la función metabólica, sobre la cual también podremos influir, pero de esto, hablaremos posteriormente).

La capacidad contráctil muscular es fundamental para poder estimular a toda la musculatura (fibras musculares) en todos sus rangos de movimiento, siempre con seguridad (evitando en la medida de lo posible aceleraciones o picos  de fuerza -ámbito salud- y técnicas de ejecución adecuadas que nos ayuden a preservar muchos años nuestro sistema muscular). Por ello insistimos tanto en una adecuada progresión-regresión-adaptación progresiva para cada grupo muscular, dando incluso pasos atrás en el entrenamiento (si, efectivamente, puntualmente y si existe estancamiento o molestias sería conveniente regresar a puntos de inicio para retomar ejercicios más sencillos) si encontramos posibles molestias o pérdidas de fuerza respecto a entrenamientos de semanas o meses anteriores.

Existen diferentes métodos o formas de estimulación muscular (no entraré en cual o qué es mejor, ya que creo que no hay ningún sistema cerrado que genere o que cumpla todos esos requisitos, y sí, creo en fusionar diferentes herramientas con seguridad y garantías de ejecución técnica adecuadas).

En lo que atañe a aspectos metabólicos la capacidad muscular de degradar e incluir vías metabólicas es espectacular. Con este cambio de paradigma el músculo pasa a formar parte fundamental de oxidación y degradación metabólica (siempre adherida a una alimentación sana y equilibrada a nuestras necesidades diarias) que nos puede aportar un suplemento vital para ayudar a mantenernos en forma y con un peso estable y adecuado para nuestra edad, sexo y complexión física individual.

Si logramos fusionar ambos aspectos tendremos mucha garantías de mantenernos en forma de una manera segura y eficiente, logrando que en nuestro día a día desaparezcan ciertas molestias o mantengamos nuestro peso dentro de los normopesos establecidos. Por ello, creemos en el hábito, no en cambios radicales, progresión y conversión de hábitos de vida saludables para poder integrarlos en nuestro día a día sin miedo a efectos rebotes ni a futuras lesiones.